En el Blog ¿Pensando en comprar un láser terapéutico?, efectivamente resulta muy importante tener en cuenta las características de los equipos y entender los parámetros de la terapia láser. Es decir, como veterinarios es importante entender los fundamentos del láser, entender el efecto de fotobiomodulación, así como los diferentes parámetros y como ayudan a crear estos efectos de la terapia láser. Entre los efectos se encuentran la longitud de onda, potencia, frecuencia, longitud de onda y dosis.
En la actualidad, en medicina veterinaria son muchos los equipos de terapia láser específicos para nosotros, con protocolos para cada patología, contando con gran cantidad de protocolos establecidos en función de la especie, color de capa y diferentes articulaciones y patologías
Una vez que se entiende todo esto, otro de los factores importantes, conociendo las características del equipo es la técnica de tratamiento, su velocidad, así como la elección del modo contacto y no-contacto. Hasta la fecha, pocos eran los equipos que daban importancia al modo de aplicación, sin embargo, se puede convertir en una variable a la hora de unificar parámetros y puede cambiar los resultados de los tratamientos de manera significativa.
Una vez que contamos con todos estos conocimientos y en función de las características de nuestro equipo sabemos cuál es nuestra técnica de tratamiento y modo de aplicación, dependiendo de la patología, ¿lo tenemos todo listo para empezar a usar nuestra terapia láser?
Posiblemente la respuesta sea…¡Sí, todo listo para empezar a usar nuestro equipo láser!
Pero llegados a este punto, después de años de experiencia aconsejando a otros compañeros sobre como usar la terapia láser en diferentes patologías. Cuando una clínica decide contar con un equipo láser y parece que entienden los parámetros anteriormente citados, lo que nos damos cuenta, es que surgen gran cantidad de dudas en cuanto a los protocolos recomendados para una determinada patología, porque ningún equipo láser va a tener protocolos para todas las patologías existentes en medicina veterinaria.
Eso significa que, ¿la mayoría de equipos láser son incompletos en cuanto a sus protocolos?
La respuesta es no. En muchas ocasiones, las mayores dudas vienen de no tener claros cuáles son nuestros objetivos con la terapia láser, es decir, para una patología que hemos pensado en el uso de la terapia láser, ¿cuáles serían los objetivos que queremos conseguir para esa patología determinada?
Como veterinarios, debemos conocer la patología, es decir, qué daños ocasiona en el organismo, los tejidos implicados y que se ven perjudicados, así como futuras lesiones como consecuencia de ésta. Todos estos conocimientos, nos va a determinar cuáles serán los objetivos que queremos conseguir con la terapia láser.
Recordando los efectos generales de la terapia láser eran alivio del dolor, control de la inflamación y efecto bioestimulante en diferentes tejidos. Para este último efecto contamos con las características de los diferentes tejidos y como la diferente densidad de estos tejidos presenta una diferente afinidad por las frecuencias y la onda continua.
Por tanto, conociendo la patología y conociendo los efectos generales del láser podemos establecer claramente los objetivos que queremos conseguir con la terapia láser a lo largo de una lesión. Por ejemplo, en la rotura del ligamento cruzado anterior, inmediatamente después de la cirugía nuestros objetivos son el alivio del dolor y el control de la inflamación.
Cuando a lo largo de las sesiones, vemos que estos objetivos se han cumplido, el siguiente objetivo de nuestra terapia láser sería la osificación.
Recordar que la terapia láser, no deja de ser un tratamiento como puede ser la prescripción de un antibiótico o un antiinflamatorio. Por tanto, nosotros como veterinarios estableceremos cuales son los objetivos, a partir de éstos, los mejores protocolos para cumplir con estos objetivos, la técnica de aplicación y el modo.
Todo esto resulta muy obvio, pero es muy importante recordarlo ya que en la clínica diaria, en muchas ocasiones, por la locura del día a día de la clínica, dejamos en manos de auxiliares la terapia láser. Con esto no queremos decir, que no deba ser así, ya que un personal bien entrenado puede aplicar el tratamiento láser, pero lo importante, la selección de protocolos y técnicas de aplicación y modo debe estar hecho por un veterinario (igual que lo haríamos con medicamentos).
Cuando delegamos en lo más importante o no nos paramos a pensar claramente en los objetivos, se eligen protocolos sin ningún sentido, sin ningún razonamiento y muy posiblemente se conviertan en malos resultas, resultando frustrante.
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Otro de los motivos importantes para conseguir un éxito en nuestros protocolos es el diagnóstico, cuando tenemos un diagnóstico definitivo tendremos unos objetivos muy claros, por el contrario, cuando no tenemos un diagnóstico, no podremos establecer unos objetivos tan claros, por lo que en ocasiones la terapia láser no será tan eficaz.
Por tanto, el conocimiento de la terapia láser, de la patología y con un diagnóstico conseguiremos un mayor éxito en nuestro tratamiento.
Desde DoctorVet, conocedores de que en ocasiones, el conocimiento de todo ello es complicado, se han creado protocolos específicos, en cada uno de estos protocolos se cuenta con TOBI (Treatment On Board Instrutions) donde se tiene información de diferentes patologías recomendadas en cada protocolo, así como información específica para cada fase de ese protocolo.
Si a pesar de ello, se siguen teniendo dudas, DoctorVet quiere asegurarse del éxito de sus tratamientos acompañando al veterinario en todo momento, contando con un equipo multidisciplinar compuesto por biofísicos y veterinarios con amplia experiencia en terapia láser, porque en ocasiones a pesar de tener a TOBI, no siempre es suficiente, el veterinario puede contar con ellos en caso de patologías complejas o dudas de tratamiento.
¡Nuestro objetivo que nuestros veterinarios se sienta seguros con DoctorVet, consiguiendo mejorar la calidad de sus pacientes!
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